VII Dolor

Tras un periodo de cuatro meses, el pasado mes de septiembre fue acabada la marcha VII Dolor. Bajo el subtítulo de El Entierro de Cristo y la Soledad de María, esta marcha viene a incluirse en el patrimonio de la hermandad del Santo Entierro de Huelva, la cual viene realizando una gran labor en el ámbito musical, siendo éste uno de los motivos de dicha composición.

Fragmento de la partitura de la marcha

Compuesta excepcionalmente en un momento de inspiración, la marcha posee un carácter marcadamente fúnebre, y culmina la utilización de un lenguaje utilizado en las anteriores marchas fúnebres. Ella forma parte del conjunto formado junto a las marchas segovianas Soledad y Jueves Santo en San Millán y la última, La Tristeza de María, al existir lazos de estilos y melodías entre la tetralogía, así como por el carácter expresivo del conjunto.
Cabe destacar su particular instrumentación, necesitando de coro mixto a cuatro voces, timbales y caja 2ª, aunque con los medios habituales en los vientos. La labor del coro es de cierta dificultad debido a los constantes cambios de tonalidad y al texto, escrito en un pseudo-latín artificial y sin aparente sentido.

Su análisis armónico es, además, bastante más complejo que el de sus predecesoras. Comenzando en la tonalidad de fa menor, al aparecer el primer tema tornará rápidamente a sol menor, primero, y a la bemol menor, después, en una sección de encadenamientos cromáticos. El desarrollo nos llevará hasta si bemol menor, entrando en el punto álgido de la obra, con la banda y el coro en fortísimo y la culminación en fa mayor a modo de cadencia picarda. Hasta aquí hemos puesto música al entierro de Cristo. La siguiente sección, menos dura, más dulcificada, reflejará el tema de la soledad de María. Este último motivo se presenta de nuevo en si bemol menor, y se repetirá en fa menor con toda la banda, aunque a media fuerza, sin molestar. Conforme vaya aproximándose el final irá apagándose hasta quedar solos los instrumentos graves en pianísimo.

Fragmento de la sección coral

Dado el carácter coral de su instrumentación, la marcha ha sido paralelamente adaptada a trío de capilla, por lo que existe la posibilidad de su interpretación de cámara, con o sin coro, dividida en las dos partes descritas anteriormente.

Por último, el título ha sido elegido como reseña al maestro Manuel Borrego, quien ya escribiera el Cuarto y el Sexto Dolor de la Virgen. Además, ha sido dedicada explícitamente a mi maestro Francisco Navarro y a mis compañeros Sergio del Toro y Moisés Martín. Una triple dedicatoria motivada por lo puntual de su composición, en representación de mi agradecimiento.

*(Añadido) Fue estrenada por La Oliva de Salteras el 31 de Marzo de 2017 (Casa Colón, Huelva)

Esperamos desde aquí que haya sido del agrado de a quienes va dirigida, así como dar las gracias por la voluntad e interés por parte de la hermandad y de su asesor musical, D. Francisco Gutiérrez.